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Reflexión Semanal 28 de septiembre de 2015

SEAN AGRADECIDOS

Esta es es una virtud que pocas personas tienen.

La Biblia relata un acontecimiento en la vida de Jesús, cuando realizó el milagro de sanar a 10 leprosos, pero solamente uno de ellos fue agradecido.

He visto personas que trabajan en una empresa, conocen el negocio, los proveedores y los clientes, aun los sistemas administrativos y la forma de operar y cuando dejan de laborar para esa empresa, la critican, compiten contra ella, se roban los clientes y realizan su negocio exactamente con los mismo métodos que aprendieron siendo sus empleados. 

 

Es fenómeno se mira en todas las áreas, lo  mismo sucede cuando se recibe un favor, cuando Dios responde a nuestras oraciones, cuando alguien nos ayuda o cuando de alguna manera somos bendecidos por las acciones de cierta persona, grupo, familia o empresa.

 

Dios nos instruye a ser agradecidos en todo momento y en cualquier circunstancia.

 

Sé que lo que voy a escribir a continuación puede parecer fuera de lugar, pero en cierta forma, Dios es agradecido, pues aun cuando Él ya lo dio todo por nosotros, cuando nosotros le damos algo, por ejemplo, nuestro tiempo, nuestro servicio, nuestras ofrendas, Él nos devuelve todo multiplicado en gran manera.

 

Dios quiere ver una actitud correcta en nosotros, por esa razón nos manda:

 

Sed agradecidos.

 

Yo te invito a reflexionar lo siguiente:

 

  1. ¿Eres agradecido con Dios?
  2. ¿Hay personas de quienes has recibido algo, por pequeño que parezca, a quienes debas un “gracias”?
  3. ¿Tu corazón está educado para ser agradecido?
  4. De alguna manera, tú eres uno de los 10 leprosos sanados, pues Dios te sanó de algo, pero ¿eres de los 9 que se fueron con su sanidad pero sin volver a dar las gracias?

 

 

Sé agradecid@.

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CURSO PARA MATRIMONIOS - RELACIONES

RELACIONES

 

Cuando Dios creó al varón, se dio cuenta que había sido Su obra cumbre de todo lo que había hecho hasta ese momento, y todo lo que el Señor había creado tenía el calificativo de “bueno en gran manera”, pero fue entonces que dijo Dios: No es bueno que el hombre esté solo; le haré ayuda idónea para él; es decir, alguien que lo acompañe y lo ayude en la vida.

 

De esta declaración del Señor, entendemos que el matrimonio es una relación constante, pero cuando nos metemos en un ritmo tan acelerado como el que solemos llevar, el resultado es que muchas personas viven su matrimonio en solitario, es decir, que aunque comparten un techo, una mesa, una cama, un presupuesto y hasta una familia, lo cierto es que viven como si no tuvieran una esposa o un esposo.

 

La gente que vive el matrimonio de esta manera, es infeliz y le abre la puerta a los pensamientos de separación y divorcio, preguntándose si la falla es de la otra persona, o si tal vez buscando un nuevo cónyuge se compondrán las cosas, pero la estadísticas muestran que del total de personas que se divorcian y se vuelven a casar, el 86% vuelve a fracasar, terminando sus vidas solos, o de aventura en aventura pero sin compromiso alguno.

 

 

La clave está en el manejo de las relaciones en todos los sentidos, y este nuevo bloque tiene este propósito, aprender a manejarlas, sanarlas y hacer del matrimonio una relación exquisita, de la que tanto él como ella, reciban la dicha, el gozo y el placer de estar casados con la bendición de Dios que nos enriquece.

 

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Reflexión Semanal 17 de agosto de 2015

PROVERBIOS 27:12

 

El avisado ve el mal y se esconde; Mas los simples pasan y llevan el daño.

 

Hay pasajes de la Biblia como éste, en los cuales el Señor nos da consejos, como los que los padres damos a nuestros hijos, los cuales depende de nosotros tomar o no tomar en cuenta, pero la clave para ser bendecidos y que nos vaya bien, consiste en ponerlos en práctica

 

Una persona avisada es una persona prudente, discreta y sagaz, es decir, que se comporta y actúa de esta manera.

 

Dios quiere que tú seas una persona que sea hábil e inteligente y te des cuenta de lo que puede ocurrir, de lo bueno y de lo malo, de lo positivo y de lo negativo, para ello nos ha dotado de dos capacidades muy especiales que se llaman: INTELIGENCIA y DISCERNIMIENTO.

 

El Señor nos ha creado con la facultad de actuar y de comportarnos con cautela y precaución para evitar o prevenir peligros en nuestras vidas; por ejemplo, tú puedes prevenir que alguien se meta a tu casa, colocando una buena cerradura en la puerta y protecciones en las ventanas; lo mismo puedes hacer al evitar sacar tu cartera o contar dinero en la calle; también puedes evitar que un niño pequeño se caiga de las escaleras; los ejemplos anteriores son muy simples y son cosas que la mayoría de la gente hace por sentido común, pero en muchas otras áreas de la vida, parecería que estuviéramos ciegos y no alcanzamos a ver ese peligro, por eso nos metemos en problemas, nos complicamos la existencia, perdemos la paz y en ocasiones perdemos amistades, perdemos dinero y perdemos muchas otras cosas, tan solo, por no ser prudentes, por no ser inteligentes, por no ejercer nuestro discernimiento.

 

Quien actúa de manera prudente, verá el peligro y lo evitará; pero quien no le da importancia, quien no piensa, continúa adelante y sufre las consecuencias que serán penosas y dolorosas y seguramente terminará enojado con Dios y pidiendo a todo mundo que lo ayude a resolver su problema o cuando menos que le ayude a orar.

 

Quien es inteligente se anticipa al peligro y toma precauciones, por eso Dios intenta decirnos una y otra vez que, prever el peligro y evitarlo es actuar con inteligencia; hay que ser muy tonto para no preverlo ni evitarlo. 

 

Tú eres una persona inteligente, prudente, eres hijo de Dios, actúa como tal.

 

 

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Reflexión Semanal 10 de agosto de 2015

PERSEVERA

 

Mateo 24:13 Mas el que persevere hasta el fin, éste será salvo.

 

¿Es usted una persona que persevera en lo que hace?

La vida cristiana tiene un reto. PERSEVERAR: Mantenerse firme en la forma de pensar, en la forma de actuar, en las convicciones y en los valores que nos rigen en todo lo que hacemos, entre otras muchas cosas más. 

 

El diccionario dice que es: Durar permanentemente.

 

El mundo cambia, las leyes civiles cambian, los conceptos de bien y de mal cambian como las modas de la ropa o de los anteojos, incluso de la arquitectura, pero la Palabra de Dios permanece para siempre, Jesucristo es el Mismo del pasado, del presente y del futuro por toda la eternidad, y quien se diga discípulo de Cristo, debe aprender a perseverar en su fe y no cambiar, ni negociar sus principios, ni sus convicciones para tratar de estar al parejo del mundo que le rodea.

 

Muchos son los que inician la vida cristiana, pero desgraciadamente una mayoría se queda en el camino. 

 

La decisión del arrepentimiento tan sólo es el primer paso dentro del caminar del cristiano, pues todavía resta la parte de la conversión, el cambio que vamos teniendo, el tratamiento de Dios con nosotros, la renovación de nuestra manera de pensar, el cambio de hábitos y costumbres, el crecimiento espiritual, el aprendizaje de la Palabra y todo el proceso que está implícito en ello.

 

Es semejante al momento en que usted sale de viaje, y toma la carretera o autopista que lo llevará a su destino, cuando usted cruza el letrero que le despide de la ciudad y que al mismo tiempo señala la cantidad de kilómetros que le faltan por recorrer, tan solo es el primer paso, pero todavía le resta cruzar todo el camino, el kilometraje señalado, así que para poder llegar usted a su destino, lo que debe hacer es perseverar durante todo su recorrido.

 

Por naturaleza el ser humano tiende a olvidar el valor de la perseverancia y lo miramos en muchas áreas de la vida:

 

En la escuela, muchos son los que inician su recorrido por una carrera universitaria, pero pocos son los que la terminan, debido a la falta de perseverancia, tan sólo en México, menos del 17% de los estudiantes que inician su recorrido escolar, logran terminar una carrera universitaria.

 

En el mundo empresarial, muchos son los que inician un negocio propio, pero esperando ser ricos de la noche a la mañana, buscando negocios fáciles, rápidos y lucrativos, pero pocos son los que perseveran paso a paso hasta que alcanzan sus metas y logros; una estadística muestra que 7 de cada 10 empresas que se generan, no superarán lo 5 años de existencia.

 

En el área laboral, es sorprendente mirar como cambia de empleo la gente, ya que bajo muchos pretextos abandona la ocupación actual y busca otra. En algunos casos el curriculum de la gente deja ver, más que su vasta experiencia, su falta de perseverancia en lo que hace.

 

En la familia, cada día crece más el índice de divorcios y separaciones, lo que indica la falta de perseverancia al momento de construir un matrimonio. Hoy día, en nuestro país, 6 de cada 10 personas han tenido más de una pareja, unión o matrimonio a lo largo de sus vidas, procreando hijos. 

 

En la oración, mucha gente vive en medio de problemas que serían sencillo de resolver para Dios, pero que no se resuelven, precisamente por la falta de perseverancia en la comunión con Dios.

 

La clave del éxito, que nos enseña el Señor para prácticamente todas las cosas, se llama Perseverancia.

 

Así que te invito a reflexionar sobre este asunto y:

 

  • No dejes las cosas que emprendes a medias.
  • Termina aquello que has iniciado.
  • Combate tu propio defecto de aburrirte y querer cambiar de actividad cuando aun no has consolidado lo que iniciaste.
  • Ah, y no culpes a Dios, cada vez que se te ocurre dejar inconclusa alguna actividad, negocio, ministerio o meta, argumentando que fue el Señor quien te lo ordenó, o que te lo hizo sentir.

 

 

PERSEVERA

 

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UNA REFLEXIÓN BASADA EN EL LIBRO DE PROVERBIOS

 

El entendido en la palabra hallará el bien, Y el que confía en Jehová es bienaventurado.

 

No basta leer, es necesario entender, ya lo dijo el mismo Señor Jesucristo: el que oye y la entiende la palabra, da fruto.

 

El diccionario define la palabra entender como: Percibir y tener una idea clara de lo que se dice, se hace o sucede o descubrir el sentido profundo de algo, penetrar a las entrañas de algo.

 

La Palabra de Dios se debe entender para poderla aplicar a la vida diaria, el Señor nos explica Su mensaje en detalle: línea por línea, renglón por renglón; el Espíritu Santo nos da revelación.

 

El entendimiento es tener la facultad de aprender, razonar, tomar decisiones y formarse una idea determinada de la realidad, basada en lo que Dios dice, no en función de lo que ocurre a nuestro derredor y ahí justamente radica el reto, pues nuestra mente se distrae con las circunstancias que nos rodean y lo que nuestros ojos ven, llámese noticias, rumores, situaciones, personas, informes, diagnósticos, etc. pero lo que Dios dice es VERDAD, pues Él es la VERDAD.

 

¿Tú a quién le crees?

 

 

Reflexiuón Semanal 

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